Verborrágica pelotuda.

Odio esa faceta en mí, no sé si a causa del alcohol o que carajo, pero la odio. No es el hecho de hablar sin parar, es el hecho de no parar de decir pelotudeces! Cosas que no suenan bien, no quedan bien, que no son lo que soy. Porque ser verborrágica divertida es lo MEJOR, ahora cuando pasás la delgada línea de 'divertida' a 'pelotuda' ahí no hay vuelta atrás. Me desequilibro a mí misma, me dan ganas de separarme de mi cuerpo y cagarme a piñas, fuera de joda. Porque ser una verborrágica me la banco, ser pelotuda me la banco, ser 'divertida' ojalá, ser una verborrágica-divertida es algo que no se encuentra mucho lamentablemente, ¿pero ser una verborrágica-pelotuda? na, no se lo deseo a nadie. #Desequilibradatotal.